Cuantas veces no hemos escuchado o aún usado nosotras mismas la frase “este es mi año”.
Tantas veces dependemos de que empiece un nuevo año para empezar a soñar más grande, a trabajar más duro por avanzar en nuestros propósitos y a empezar a ver la vida con una perspectiva mejor que la del año anterior.
Sin embargo, inmediatamente cuando algo se sale de nuestro plan establecido para el año y nos enfrentamos a dificultades nuestra perspectiva cambia completamente a decir “en fin, otro año que no es mi año”
Mi pregunta para ti hoy es ¿por qué dependemos de años para definir si nuestra vida es buena o mala?
La belleza de la vida con Jesús es que a pesar de pasar por altas y bajas, hay propósito detrás de cada cosa. Hay más bendición de la que crees viniendo detrás de ese diagnóstico. Hay personas que van a ser bendecidas con el testimonio de cómo venciste ese pecado que aún te persigue.
No sé como fue tu 2019, al menos el mío estuvo lleno de sueños, oportunidades increíbles pero también de desilusiones y de diagnósticos inciertos. Aún en medio de todo eso y aún empezando el 2020 con incertidumbre, sé de donde viene mi esperanza.
Créeme que esté año habrá situaciones que no podremos cambiar pero lo que sí podemos cambiar es la perspectiva y la manera en que permitimos que eso que tenía el poder de destruirnos, Dios lo tome y lo use para construirnos, levantarnos y en consecuencia podamos levantar a otros pasando por lo mismo.
En Jesús, cada año de nuestra vida es nuestro año sabiendo que Su voluntad para nosotras es buena, agradable y perfecta y que todo lo malo lo torna a algo bueno.
“Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos”.
Romanos 8:28
El 2020 no va a ser tu año porque todo vaya a salir como quieras, sino porque Dios te va a estirar, usar e incrementar tu fe.
Este año te reto a abrazar cada dificultad y convertirla en fe, a celebrar cada victoria, a aprender de cada error, a reír y amar más, a depender de Su gracia, a confiar y dejarte ser estirada a más.
ORACIÓN:
Señor, llena este año con más de Ti y menos de nosotras. Que nuestro corazón dependa de Ti y tus promesas, en lugar de nuestros planes y expectativas. Que todo lo que vivamos y hagamos te alabe. Confiamos en que todo lo usas para nuestro bien y favor. Llévanos a nuevos niveles en este año
Oramos en el nombre de Jesús, amén.
XOXO
Dania
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